viernes, 21 de septiembre de 2012

No recibo lo malo - reflexiones


En una oportunidad un hombre insultaba a un sabio quien se mantuvo en un estado de imperturbable serenidad y silencio. Al terminar el hombre con los insultos el discípulo del sabio se sintió impotente por los insultos que recibió su maestro. El sabio le dijo: “Si yo te regalo un caballo pero tú no lo aceptas, ¿de quién es el regalo?” El discípulo contestó: “Si no lo acepto sería tuyo todavía”. El sabio respondió: “Pues no acepto los insultos de este hombre así que éstos se quedarán con él”.
Todo lo bueno, todo lo justo, todo lo honesto, lo abrazo. Todo lo malo no me afecta porque no lo recibo, va de vuelta con el que me lo envió.
Así debemos obrar en la vida cuando recibamos algo negativo de parte de quien sea. Debe quedarse con el que lo dijo; esto requiere de una fuerza de espíritu grande pues sin duda que lo primero que nos viene a la mente es devolverle la ofensa o el insulto a quien nos lo dijo. Personalmente yo no reacciono de entrada pero una vez que medito en el tema lo retomo y lo aclaro si es que vale la pena hacerlo. Hay veces que no debemos aclarar nada porque entendemos que los que dirigen palabras duras contra nosotros no saben realmente lo que dicen.
Pero otras veces nos damos cuenta que esa persona tiene realmente un problema con nosotros y es mejor tratarlo, máxime si las ofensas se repiten. Por ejemplo, esto sucede en algunas familias; a mí me tocó tener un padre que no medía sus palabras y que fue muy difícil convivir con él, no sólo para mí, sino también para el resto de mi familia. Otro lugar fue el trabajo. Especialmente si conocen tu forma de pensar en cuanto a Dios también va a ser motivo de "insultos u oprobios” de diferentes tipos.
Recuerdo que cuando trabajaba en una oficina mi jefa era una mujer buena, me permitía poner algún cuadro que hablara de Dios, y los que entraban a mi despacho decían: “llegamos a la capillita”; eso no era en realidad ofensivo para mí; lo tomaba en broma, aunque sonara un poco sarcástico. Y también entre el círculo de cristianos, lamentablemente, hay mucha crítica respecto de los métodos que usamos para hacer tal o cual cosa. Hay predicadores que quiero y respeto muchísimo que son literalmente “bombardeados” con palabras hirientes e irrespetuosas.
Mi pastor sabiamente dice: “sean libres de la gente”; esto es algo que debemos tener presente todos los días de nuestra vida. Él comenta que uno nunca tiene problemas con el gato o con el perro; los problemas, como las bendiciones, vendrán a través de las personas. Por eso es necesario aprender a tratar a la gente.
La humillación es una de las experiencias universales que hasta el mismo Jesús pasó. ¿Quién no fue maltratado, humillado por una pareja, por un amigo, por un compañero de trabajo? Ser humillado según el diccionario, es sentirse rebajado, inferiorizado, sometido, ultrajado por otro. Ser humillado no es lo mismo que padecer una broma. Humillar a alguien tiene el objetivo de destruir a esa persona, destruir su corazón, su vida, su sueño.
En la Biblia se habla de que cuando Saúl fue elegido rey, hubo gente que le menospreció, por eso algunos dijeron:
“¿Cómo nos ha de salvar éste? Y le tuvieron en poco, y no le trajeron presente, más él disimuló”.
La consecuencia fue una actitud correcta por parte de Saúl; en lugar de “hacerse el fuerte” y empezar a hacer uso de la autoridad que se le había conferido por medio del profeta Samuel, simuló que no había escuchado nada y tampoco hizo caso al hecho de que no le hubiesen traído regalos.
En los países orientales el honor del soberano y el esplendor de su casa real se apoyaban no en una tarifa fija de impuestos, sino en los obsequios traídos en ciertas épocas por oficiales y hombres de recursos, desde todas partes del reino según las riquezas del individuo, las cuales tenían un valor reconocido. Por eso al rehusar llevarle ese tributo, Saúl no pudo establecer su reino por un tiempo. Pero él disimuló soportando el agravio con prudencia y magnanimidad, cualidades muy útiles en el principio de su gobierno.
¿Cómo relacionamos esto con nuestra vida? No van a faltar situaciones en las que algo semejante nos pueda pasar, quizás te ascendieron en el trabajo y hubo algunas caras disgustadas, o sacaste la mejor nota en un examen y no faltó el envidioso que te dijera algo para molestarte, y lamentablemente en muchos hogares también pasa cuando nos comparan con nuestros hermanos y nunca es suficiente lo que hacemos para agradarles a nuestra familia; “siempre nos falta algo” , nunca logramos satisfacerles del todo.
Por eso el consejo de Dios para tu vida es: NO RECIBAS LO MALO.
No dejes que te traspasen las críticas, los desprecios, las palabras negativas, los insultos, NO TIENES QUE PERMITIR QUE ENTREN A TU CORAZÓN.
Yo sé que no es fácil, y más si convives con un maltratador verbal. Pero quiero decirte que va a haber un día en que eso se va a terminar en tu vida. En gran medida depende de ti, si ya eres mayor de edad, para pedirle a Dios que te ayude a encaminar tu vida de tal manera que ya no tengas que escuchar más ninguna palabra que te lastime.
 CUANDO NOS ANIMAMOS A CAMBIAR DEJAMOS DE SER VÍCTIMAS.
Debo perdonar y soltar de mi vida a todos los que me lastimaron:
Perdonar es algo que haces por ti, no por el otro.
Perdonar es tratar de olvidar: “No pasó nada”, “Ya fue”.
Perdonar es: “Me lastimaste, tengo derecho a venganza, pero no me voy vengar, Dios es mi venganza”. 
Y te desatas de esa persona, porque si no perdonas llevas esa carga; a esa persona, en el mundo espiritual, la llevas encima de ti, pero el perdón nos coloca por encima de la autoridad de nuestro ofensor; nos pone en un nivel espiritual más alto, porque ya “le solté de mi vida”. Cuando esto sucede en tu vida, en ese momento Dios puede comenzar a sanar tu herida.

Siempre detrás de tus sueños va a haber cuervos: gente que te va a venir a molestar; gente que odia que tú sueñes lo que sueñas. Dicen que los cuervos molestan a las águilas, pero las águilas nunca atacan a los cuervos: levantan el vuelo. Porque los cuervos no pueden elevarse tanto en el vuelo. Yo quiero decirte: si hay cuervos delante de ti, levanta el vuelo; vuela más alto. Di: “Yo no tengo ningún enemigo, porque Dios me ha dicho: estás volando tan alto que has pasado a todos los cuervos que te han querido molestar.” Di: yo sigo levantando el vuelo. No pelees con los cuervos. ¿Sabes cuánto vuela un águila? mil ochocientos metros sobre el nivel del mar ¿Y un cuervo? no sé cuánto vuela; pero mil ochocientos metros no, ¡los perdí de vista ya no sé cuándo!

Silvia Truffa

¿Qué guía tu vida? - Vídeo reflexivo



Reflexiona acerca de lo que en este momento guía tu vida. Y comienza a darle a Dios esa tarea. Una vida sin Dios no tiene propósito y sin propósito no tiene sentido la vida. Dios te bendiga. 

Su Otro Nombre - Relación con Dios

“Yo, el SEÑOR tu Dios, soy un Dios celoso.” Éxodo 20:5
Celoso- La palabra hebrea qanna es una palabra que se utiliza para describir a Dios. De hecho, en Éxodo 34:14, esta palabra es parte del nombre de Dios (“el Señor cuyo nombre es celoso”). Lo que sabemos sobre los nombramientos en las culturas semitas debería hacernos gemir cuando leemos esto. El celo es un atributo esencial del Señor.
Si no te tomas un poco de tiempo para reflexionar sobre el significado de esto, simplemente no comprenderás cuán serio es el derecho que Dios tiene sobre nosotros. Y probablemente no comprenderás por qué Él exige devoción exclusiva, ni por qué espera que nuestros matrimonios reflejen la misma cualidad. El celo mora en el centro de quien es Dios.
Ya lo sé. Tú y yo hemos sido entrenados para creer que el corazón de Dios es un corazón de amor. Como tenemos una definición de amor difusa, egocéntrica y posesiva tendemos a imaginar que Dios es un tipo de Padre siempre perdonador, generoso y bueno, que ignora los errores y rebeliones de Sus hijos, que mantiene Su respiración hasta que dejamos de actuar como idiotas y regresamos a Su cuidado.
Lo siento. Eso no es lo que nos dice la Escritura. Si uno de los nombres de Dios es celoso, lo mejor es que nos aseguremos que tenemos muy clara esta imagen antes de seguir actuando como si nuestro comportamiento fuera irrelevante.
La otra cara del amor es la ira. Las dos se unen. Dios es compasivo. Lo dice Él (Éxodo 34:6). Ese es el primer atributo de Su autoidentificación. Pero no es el único. También es tremendamente posesivo de lo que le pertenece. No tolerará duplicidad ni intenciones engañosas. Nunca aceptará el adulterio espiritual. Tú y yo le pertenecemos y nunca permitirá que divaguemos en nuestros afectos hacia otro.
Él nos posee. No permitirá que huyamos. Cualquier evangelio de amor, gracia y perdón que no incluya posesión, celo y fidelidad es como una ceremonia de matrimonio a la que asiste sólo la amante.
¿Qué significa para nosotros? A fin de cuentas, todos sabemos que Dios exige exclusividad en adoración y que no ofrezcamos libaciones a ídolos. ¡Espera! Reflexiona de nuevo. Cuando Dios se describe como Dios celoso frecuentemente asocia los comportamientos de infidelidad con el servicio a dioses falsos. Pero no debemos pensar en esto, como tampoco inclinarnos en algún rito pagano (idólatra).
Es el equivalente a establecer pacto con un dios falso. En otras palabras, permitimos que el dios falso dicte los términos de nuestra vida. La adoración al dios falso puede disfrazarse según la manera en que trabajamos. Si no dedicamos nuestros esfuerzos y tiempo según Sus mandamientos (los de Dios), entonces atendemos amantes. Gráficamente hablando, mantenemos amoríos con otro amante, provocando el celo de Dios.
Ahora comienza a instalarse en nosotros este pensamiento. Si lo que haces en este mundo no es lo que Dios te dijo que hicieses, entonces probablemente sirves a otro dios. Puede ser el dios de la seguridad o prosperidad, del placer o la pasión, pero no será Dios, pues Él no tolera rivales. Quizás es el momento de ver seriamente tu trabajo, tus prioridades y tus planes. ¿Son el resultado de escuchar al Rey y servirle solo a Él?

"Renuévame"- Marcos Witt, última versión 2011 y "Yo te busco" - vídeos

Recientemente he recibido un correo electrónico del concierto que dirigió y cantó Marcos Witt en Puerto Rico con motivo del 25 aniversario de su ministerio pastoral. Para los profanos, solamente decir que este hombre, aparte de cantautor cristiano excelente, también es compositor, pastor y líder cristiano-evangélico.
Cuando escuché este concierto realmente quedé estupefacto. Su impacto en mí fue tremendo. ¡Es… genial! Dentro de él, y las más de dos horas que dura, encontramos muchas canciones que jalonan la carrera musical de Marcos. Pero hay una, como bien reconoce él, que, para mi gusto y también para él, es de lo mejor y, seguramente, su canción más famosa. Se llama “Renuévame”.
“Renuévame” es una canción que compuso en 1.992 y es un canto de alabanza-adoración al Señor. En ella se oye la necesidad que tenemos de Él, que necesitamos que nos renueve. Necesitamos que cambie nuestra naturaleza pecadora por la suya; por su naturaleza espiritual. Dice que “todo lo que hay dentro de mí necesita ser cambiado, Señor; todo necesita más de ti”.
Esta canción dio la vuelta al mundo, se vendieron miles, miles y miles de copias; hay múltiples versiones de ella, como la última precisamente en este concierto, que es una bachata, como le enseñó nuestro querido y admirado Juan Luis Guerra. Pero la mejor versión de todas es la de Dios, porque sólo Él sabe cómo hacer para que todo, absolutamente todo, en nuestro corazón sea cambiado y dirigido a Él.
Marcos la compuso con todo su corazón, como para el Señor. En la Biblia, en Colosenses 3:23 leemos: y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres, pero… cuando la acabó comprendió que, aunque verdaderamente excelsa, necesitaba un complemento; necesitaba algo más.
No fue sino hasta 15 años después, cuando encontró gracias a Dios ese complemento que le faltaba, y fue al componer la canción “Yo te busco”. Ésta dice textualmente “Yo te busco con fuego en mi corazón, te anhelo, te necesito, te amo más que a mi ser”. ¿Por qué le buscamos así? Porque necesitamos de Él, porque reconocemos que no somos nada sin Él, y le pedimos, y ahí enlazamos de nuevo con la primera canción, que nos “renueve”. “Que nos cambie”.

Witt ya encontró ese complemento a “Renuévame”. Por esta razón, en la mayoría de sus conciertos musicales ambas canciones van siempre juntas, una detrás de otra.

En aquel momento los discípulos de Jesús no le entendían, después sí, cuando, como leemos en Juan 10:10, Jesús les dijo: “Yo he venido para que tengan vida y para que la tengan en abundancia”. Y en Juan 8:12 Jesús les habló en otra ocasión diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.

M.G.L.

Que Dios os bendiga.


 

Credibilidad Perdida - Pensamientos Cristianos

 “En Bulgaria, los búlgaros mueven la cabeza de arriba a abajo para decir ‘no’ y de un lado a otro para decir ‘sí’.
Hay personas quienes al decir no, uno no sabe si en realidad es no.
Cuando perdemos la credibilidad perdemos un elemento clave en las relaciones”.
Salmos 51:6 “Tú amas la verdad en lo íntimo y en lo secreto me has hecho comprender sabiduría”.
Salmos 52:3 “Amaste el mal más que el bien, la mentira más que la verdad”. Selah.
Mateo 5:37  Cuando ustedes digan “sí”, que sea realmente sí; y cuando digan “no”, que sea no. Cualquier cosa de más, proviene del maligno.
Mateo 13:19
A todo el que oye la palabra del reino y no la entiende, el maligno viene y arrebata lo que fue sembrado en su corazón. Este es aquel en quien se sembró la semilla junto al camino.
Juan 17:15
No te ruego que los saques del mundo, sino que los guardes del maligno.
2 Tesalonicenses 3:3
Pero fiel es el Señor quien os fortalecerá y protegerá del maligno.
1 Juan 5:18
Sabemos que todo el que ha nacido de Dios, no peca; sino que aquel que nació de Dios lo guarda y el maligno no lo toca.