domingo, 15 de julio de 2012

Dios tiene todo bajo control


Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo;
y si por los ríos, no te anegarán.
Cuando pases por el fuego, no te quemarás,
ni la llama arderá en ti.
Porque yo Jehová, Dios tuyo, el Santo de Israel, soy tu Salvador;
a Egipto he dado por tu rescate, a Etiopía y a Seba por ti.
Porque a mis ojos fuiste de gran estima,
fuiste honorable, y yo te amé;
daré, pues, hombres por ti, y naciones por tu vida.
No temas, porque yo estoy contigo...
Isaías 43: 2-5

En el desierto que estés pasando en este momento quiero recordarte que  Dios tiene todo bajo control.
 Si  piensas que Dios se ha olvidado de ti, te digo que no; DIOS ES AMOR  y ¿cómo podrá olvidarse de aquellos por quienes envió a su Hijo para regalarles Salvación y muchos privilegios que nos ha regalado hoy que somos sus hijos?

 "No temas, porque yo estoy contigo;
no desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo;
siempre te ayudaré,
siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia."
Isaías 41:10

Hay desiertos que es necesario que los atravesemos porque en medio de ellos podremos disfrutar del agua de vida que te saciará y podrás seguir caminando.
Hay desiertos que nos permitirán comer de ese Pan de Vida que hará que estemos sustentos en nuestra vida espiritual, el cual nos permitirá continuar caminando.
 Hay desiertos que te permitirán ver milagros, experimentar todas aquellas cosas grandes y ocultas que Dios te revelará en ese camino,  para que levantes tu mirada hacia el cielo y puedas ver que en ese inmenso cielo hay alguien que no aparta su vista de ti.
 Hay desiertos en los que sentirás que vas completamente sola, como lo puedas estar pensando hoy, pero sabes que   ¡¡¡Dios Tiene el Control!!!   y es Él quien en este mismo instante te sostiene en sus brazos de Amor.

Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz.
En el mundo tendréis aflicción;
pero confiad, yo he vencido al mundo.
Juan 16: 33

NO HAY NADA IMPOSIBLE PARA DIOS!!!

Él sabe como te sientes-reflexión-vídeo

Un niño entró en una tienda de mascotas, buscando un perrito. El dueño de la tienda le mostró una camada de perritos en una caja. El niño miró los perritos. Levantó a cada uno de los perritos, los examinó, y los puso de nuevo en la caja.
Después de unos minutos, caminó hacia donde estaba el dueño y le dijo: “Ya escogí uno” ¿Cuánto vale?
El hombre le dijo el precio, y el niño prometió volver en unos días con el dinero. “No tardes mucho”, le advitió el dueño, “los perritos como esos se venden rápido”.
El niño se volvió y con una sonrisa inteligente le dijo: “No estoy preocupado, el mío estará aquí”.
El niño se fue a trabajar, quitando hierbas, limpiando ventanas y jardines. Trabajó duro y ahorró su dinero. Cuando tuvo suficiente para el perrito, volvió a la tienda.
Caminó hacia el mostrador y puso unos pocos billetes. El dueño de la tienda clasificó los billetes y los contó. Después de verificar la cantidad, le sonrió al niño y le dijo: “Todo bien hijo, puedes ir a buscar tu perrito.”
El niño extendió la mano hacia la parte trasera de la caja y sacó un perrito flaco, cojo y se dispuso para irse.
El dueño le detuvo.
“No te lleves ese perrito” le refutó, “Es cojo. No puede jugar. Nunca correrá contigo. No puede ir a buscar nada. Llévate uno de los sanos”.
“No, gracias, señor”, contestó el niño. “Este es exactamente la clase de perro que he estado buscando”.
Cuando el niño se volvió para salir, el dueño iba a decir algo, pero calló. De pronto entendió. Debajo de los pantalones del niño se veía un aparato para su pierna lisiada.
¿Por qué el niño quería a ese perrito? Porque él sabía cómo se sentía. Y sabía que era muy especial.
Jesús sabe cómo te sientes. ¿Estás bajo presión en el trabajo? Jesús sabe cómo te sientes. ¿Tienes más de lo que humanamente puedes hacer? El también. ¿Toma la gente más de ti de lo que puedes dar?. Jesús entiende. ¿No te escuchan tus hijos?. ¿Tus estudiantes no se esfuerzan?. Jesús sabe cómo te sientes.
Eres muy valioso para Él. Tan valioso que se hizo hombre como tú para que vinieras a Él.
Cuando luchas, Él escucha. Cuando añoras, Él responde. Cuando dudas, Él escucha. Él ya pasó por eso.
Hay alguien que te aprecia por lo que eres, te acepta y te ama incondicionalmente, porque ha estado en tu piel... Su nombre es Jesucristo
Porque no tenemos un sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza. Hebreos 4:15.

No te rindas...-Reflexiones

 Era mitad del siglo XIX y se escuchaba en las oficinas de la Escuela Primaria de un pequeño pueblo de Ohio, de los Estados Unidos, la siguiente conversación.
- “El niño tiene un leve retraso mental que le impide adquirir los conocimientos a la par que sus compañeros de clase. Debe dejar de traer a su hijo a esta escuela”.
… A la mujer no pareció afectarle mucho la sentencia de la maestra, pero se encargó de transmitirle a su hijo que el no poseía ningún retraso y que Dios, en quien confiaba fielmente desde su juventud, no le había dado vida para avergonzarlo sino para ser un hombre de éxito.
Pocos años después, este niño, con solo 12 años, fundó un diario y se encargaba de venderlo en la estación de ferrocarril de Nueva York.
No fue todo, se dedicó a estudiar los fenómenos eléctricos y, gracias a sus estudios, logró perfeccionar el teléfono, el micrófono, el megáfono, y otros inventos como el fonógrafo, por citar sólo uno.
Qué lejos quedaba en el recuerdo del niño las palabras de su maestra.
Todo parecía ir sobre ruedas hasta que un día se encontró con un gran obstáculo, su mayor proyecto se estaba desvaneciendo ante sus ojos, había buscado incansablemente la forma de construir un filamento capaz de generar una luz incandescente, pero que al mismo tiempo resistiera la fuerza de la energía que lo encendía.
Sus asesores financieros estaban impacientes, sus competidores parecían acercarse a la solución antes que él, y hasta sus colaboradores se encontraban desesperanzados.
Después de tres años de intenso trabajo uno de ellos le dijo …”Thomas, abandona este proyecto, ya llevamos más de tres años, lo hemos intentado de más de dos mil formas distintas y solo conocemos el fracaso en cada intento”.
La respuesta no se hizo esperar y se dirigió a su colaborador con la misma vehemencia que su madre había tenido unos 25 años atrás …”mira, no sé que entiendes tú por fracaso, pero de algo sí estoy seguro, y es que en todo este tiempo aprendí que antes de pensar en dos mil fracasos debo pensar que hay más de dos mil maneras de no hacer este filamento, y eso me da la razón de que estoy bien encaminado”. Pocos meses después iluminó toda una calle utilizando la luz eléctrica.
Su nombre fue Thomas Alva Edison, una persona que entendió la manera de vivir de gloria en gloria, y pudo ver, aún en las tormentas más fuertes, el pequeño sendero que le llevaría al éxito.
Habacuc 3:17 al 19 “Aunque la higuera no florezca, ni en las vides haya frutos; aunque mienta la obra de la oliva, y los labrados no me den ni para mantenerme. Aunque las ovejas sean quitadas de la majada y no haya vacas en los corrales; con todo eso yo me alegraré en el Señor y me gozaré en el Dios de mi salvación. El Señor es mi fortaleza… y me hará andar sobre alturas”

Ser feliz… ¡tu reto!- Reflexiones con vídeo


Parece difícil,
Parece imposible,
Pero no hay nada que impida,
Que un sueño pueda cumplirse. . .
No hay nada que pueda apartarte,
Del deseo de tu corazón,
No hay nada que venza la fuerza de una ilusión. . .
Por eso tú. . .
Tú puedes ser aquello que tú quieras ser,
Tú puedes ser el sueño que soñaste ayer,
Tú puedes ser la estrella que brillando ves,
Tú lo decides. . .
Por eso tú. . .

Tú puedes ir tan alto como quieras ir,
Tú puedes alcanzar lo que hay dentro de ti,
Tú puedes ser todo eso que te hace feliz,
Tú lo decides hoy. . .
Parece difícil,
Parece imposible,
Pero no hay nada que cambie,
El camino que tú elegiste. . .
No hay nada que pueda apartarte

Del deseo de tu corazón,
No hay nada que venza la fuerza de una ilusión. . ..



El Señor es mi fortaleza-Reflexiones con vídeo-Yo Soy Tu Fortaleza

“Tú, Señor, eres mi fuerza; yo te amo. Tú eres mi protector, mi lugar de refugio, mi libertador, mi Dios, la roca que me protege, mi escudo, el poder que me salva, mi más alto escondite.


“Tú, Señor eres digno de alabanza, cuando te llamo me salvas de mi enemigos. La muerte me enredó en sus lazos; sentí miedo ante el torrente destructor. La muerte me envolvió en sus lazos; me encontré en trampas mortales. En mi angustia llamé al Señor, pedí ayuda a mi Dios, y Él me escuchó desde su templo; mis gritos llegaron a sus oídos.
El Señor, el Altísimo, hizo oír su voz de trueno desde el cielo; granizos y carbones encendidos. Lanzó sus rayos como flechas y a mis enemigos hizo huir en desorden. El fondo del mar quedó al descubierto; las bases del mundo quedaron a la vista por la voz amenazante del Señor, por el fuerte soplo que lanzó. Dios me tendió la mano desde lo alto y con su mano me sacó del mar inmenso.
Me salvó de enemigos poderosos que me odiaban y eran más fuertes que yo. Me atacaron cuando yo estaba en desgracia, pero el Señor me dio su apoyo: me sacó a la libertad; me salvó porque me amaba.
El Señor me ha dado la recompensa que merecía mi limpia conducta, pues yo he seguido el camino del Señor. Jamas he renegado de mi Dios. Yo tengo presente todos sus decretos, jamás he rechazado sus leyes.  Me he conducido ante Él sin tacha alguna; me he alejado de la maldad.
El Señor me ha recompensado por mi limpia conducta en su presencia. Tú, Señor eres fiel con el que es fiel, irreprochable con el que es irreprochable, sincero con el que es sincero, pero sagaz con el que es astuto. Tú salvas a los humildes, pero humillas a los orgullosos. Tú, Señor me das luz; tú, Dios mío, alumbras mi oscuridad. Con tu ayuda atacaré al enemigo y sobre el muro de sus ciudades pasaré.
El camino de Dios perfecto; la promesa del Señor es digna de confianza; Dios protege a todos cuantos en él confían. ¿Quién es Dios, sino el Señor? Qué otro dios hay que pueda protegernos? Dios es quien me da fuerzas, quien hace intachable mi conducta, quien me da pies ligeros como de cierva, quien me hace estar firme en las alturas, quien me entrena para la batalla, quien me da fuerza para tensar arcos de bronce.
Salmo 18.
El Señor es mi luz y mi salvación

De quién temeré?

El Señor es la fortaleza

de mi vida?
¿De quién he de atemorizarme?

Cuando se juntaron contra mi

mis enemigos y mis angustiadores
Para comer mis carnes
ellos tropezaron y cayeron

Aunque un ejército acampe contra mí

no temerá mi corazón
Yo estaré confiado

Desde el vientre te conocí

te he visto llorar y reír
te puse nombre y
te amo tanto a ti

Tú has sido mi inspiración

la razón de la creación
te he escogido
eres tan mío

Yo soy tu Fortaleza

la paz de tu alma
siempre Yo seré tu Dios
en la tormenta yo soy tu calma
quien sana todo tu dolor

En mis pensamientos estás

en mi corazón te he escondí
eres mi hijo y yo tu padre soy
tu Fortaleza
la paz de tu alma
por siempre Yo seré tu Dios
en la tormenta yo soy tu calma
quien sana todo tu dolor

La paz de tu alma
Tu Dios