lunes, 9 de abril de 2012

Reflexión»Termina la Carrera


   Durante las Olimpiadas de Verano de 1992, un joven corredor estadounidense de larga distancia, Derrick Redmond, corría al frente de su grupo muy dispuesto a ganar la carrera.
Súbitamente, en la vuelta final, se le paralizó un tendón de la pierna. Cayó al piso en agonía y sus compañeros lo esquivaron mientras lo pasaban.
Sus padres y amigos dejaron escapar un gemido colectivo, al igual que millones de estadounidenses que estaban observándolo vía satélite.
Entonces, con gran dolor, Derrick se levantó de la pista y comenzó a saltar sobre su pierna en dirección a la línea de llegada. Los últimos rezagados lo pasaron. La gente de los costados de la pista que temían por su salud le gritaban que se acostase. Sin embargo, Derrick siguió saltando. Mucho después de terminada la carrera, Derrick seguía saltando.
Derrick necesitaba recorrer todavía cerca de noventa metros cuando una figura saltó de las tribunas y comenzó a saltar por encima de las personas, sillas y de la valla de contención. Era Jim, su padre.
Corriendo hasta donde se encontraba su hijo, pasó un brazo por los hombros y juntos, en parte a saltos y en parte corriendo hicieron el resto del camino.
Derrick no consiguió una medalla de oro ese día, pero todos los que lo vieron a él y a su padre lo sabían… Derrick y Jim Redmond tenían corazones de oro.
El honor espera a aquellos que terminan la carrera.
Una vez que empiece una tarea, nunca la deje hasta terminarla. Ya sea trabajo grande o pequeño, bien hecho o no.
Eclesiastés 9:10
Todo lo que tu mano halle para hacer, hazlo según tus fuerzas.

La Familia: El sueño de Dios.


El sueño de Dios es una FAMILIA unida en amor, para siempre.
El sueño de Dios cuando creó al hombre y la mujer  a su imagen y semejanza y les dio la capacidad de reproducirse en la misma especie, queda absolutamente claro: EL quería tener una familia, una gran familia alrededor de todo el mundo.
Igualmente una familia comienza por medio del matrimonio de un hombre y una mujer, y comienza con un sueño: el sueño de amar y ser amado, de vivir una vida juntos, trabajar, tener hijos, disfrutar de todas las cosas buenas de la vida, enfrentar las circunstancias de la vida juntos y terminar viejitos amándose y felices.
Este es el sueño de Dios y es también el sueño de las parejas al comenzar la relación. Pero lamentablemente a través de la vida, este sueño enfrenta muchos obstáculos y muchos se desaniman, no saben como superar los obstáculos, y pierden el sueño. Se dan por vencidos en algún momento de la vida del matrimonio. Y la principal razón por la que se dan por vencidos y abandonan el sueño que un día los unió, es porque no saben como manejar los conflictos, no buscan ayuda adecuada a tiempo y se desesperan.
Gen 1:27-28: Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó. Los bendijo Dios y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra y sometedla; ejerced potestad sobre los peces del mar, las aves de los cielos y todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
Como es un sueño primeramente de Dios, ÉL estableció las reglas sobre las cuales debe funcionar. Y quienes siguen las instrucciones de Dios, alcanzan un matrimonio saludable y una familia estable y feliz. Es una rebeldía tratar de manejar el matrimonio a la manera de cada quién. Dios ya dejó escrito lo que funciona y como funciona. ÉL nos diseñó y Él sabe perfectamente como funcionamos. Por lo tanto si queremos que nuestros matrimonios funcionen, tenemos que hacerlo a la manera de Dios.
Como todo sueño, para que se haga realidad, debe de tener una visión, una misión. La visión la aporta Dios como diseñador y creador de la raza humana. La misión la desarrollamos cada pareja, siguiendo la visión de Dios y con una importante cuota de Trabajo, Esfuerzo, Capacitación y una Actitud sabia y correcta.
Todo sueño pasa pruebas. Y tenemos que entender que esto es normal. Y tenemos que entender sobre todo que en los tiempos de pruebas es cuando más debemos unirnos los esposos, orando juntos, asistiendo a la Iglesia regularmente, buscando la ayuda correcta en el momento oportuno.
Nunca permitas que nada ni nadie te robe tu más preciado sueño: tener una familia saludable. No permitas que el orgullo y el egoísmo te roben el sueño de disfrutar de una familia estable. Nunca permitas que el enojo y el resentimiento destruyan tu sueño más preciado. No dejes que el pasado destruya este sueño familiar!
Si has perdido fuerzas para luchar por tu matrimonio, hoy te exhortamos a que no te rindas jamás. Nunca abandones el sueño de Dios y tu sueño de tener una familia saludable. Si has flaqueado, levántate hoy con nuevas fuerzas, clama al Señor por fortaleza y sabiduría y trabaja fuerte por la sanidad y restauración total de tu matrimonio y tu familia. Luego pídele perdón a tu cónyuge por haber considerado la opción del rompimiento como una opción normal. Oren juntos y tomen la decisión de luchar por su matrimonio con las fuerzas y las herramientas del Señor. Y oren para que este sueño de Dios impacte sus vidas.
Luis Y Hannia Fernandez
www.libresparaamar.org
matrimonios@libresparaamar.org

Un cuento para el día de San Valentín


Larry y Jo Ann eran un matrimonio corriente. Vivían en una casa cualquiera, en una calle como todas. Como cualquier otro matrimonio común, luchaban para llegar a fin de mes y para dar a sus hijos todo lo necesario.
También eran como todos en otro sentido: se peleaban. Gran parte de sus charlas se referían a lo que no iba bien en su matrimonio y a cuál de los dos era el culpable.
Hasta que un día sucedió algo extraordinario.
—Fíjate Jo Ann, tengo una cómoda mágica, increíble. Cada vez que abro algún cajón está lleno de calcetines o de ropa interior —dijo Larry—. Quiero agradecerte que los hayas estado llenando durante todos estos años.
Jo Ann se lo quedó mirando por encima de las gafas.
—¿Qué es lo que quieres, Larry?
—Nada. Sólo que sepas que te doy las gracias por estos cajones mágicos.
Como aquella no era la primera vez que Larry le salía con algo raro, Jo Ann olvidó el incidente hasta pasados algunos días.
—Jo Ann, gracias por haber anotado tan correctamente los números en el libro de gastos este mes. Las dieciséis anotaciones son correctas: es todo un récord.
Sin poder dar crédito a sus oídos, Jo Ann levantó los ojos del calcetín que estaba zurciendo.
—Larry, si siempre te estás quejando de que anoto mal los números, ¿por qué ahora no lo haces?
—Porque sí. Sólo quería que supieras que me doy cuenta del esfuerzo que estás haciendo.
Jo Ann sacudió la cabeza y siguió con sus remiendos. Para sus adentros, masculló:
—¿Qué le estará pasando?
Sin embargo, al día siguiente, cuando Jo Ann hizo un cheque en la tienda, se fijó para asegurarse de que había anotado bien el número del cheque.
—¿Por qué de pronto les estoy dando importancia a estos estúpidos números? —se preguntó.
Trató de no hacer caso del incidente, pero el extraño comportamiento de Larry se intensificó.
—Jo Ann, la cena ha sido estupenda —le dijo una noche—. Te agradezco el esfuerzo. Vaya, si calculo que en los últimos quince años habrás preparado más de catorce mil comidas para mí y para los niños…
Otra vez fue:
—Jo Ann, la casa parece un espejo. Debes de haber trabajado muchísimo para que tenga tan buen aspecto.
Y hasta:
—Jo Ann, te agradezco que seas como eres. Realmente, me da mucho placer tu compañía.
Jo Ann estaba empezando a preocuparse. Se preguntaba qué se había hecho de los sarcasmos y de las críticas.
Sus temores de que a su marido le estaba pasando algo raro se vieron confirmados por la queja de Shelly, su hija de dieciséis años, que le comentó:
—Mamá, papá se ha vuelto loco. Acaba de decirme que estaba guapa con todo este maquillaje y esta ropa de estar por casa. No es propio de él. ¿Qué es lo que le pasa?
Fuera lo que fuere lo que le pasara, Larry no cambiaba. Casi todos los días seguía haciendo algún comentario positivo.
Pasadas varias semanas, Jo Ann se fue acostumbrando al extraño comportamiento de su marido, e incluso alguna vez se lo recompensó, a regañadientes, con un escueto «Gracias». Se sentía orgullosa de ir manteniéndose a la altura de las circunstancias, hasta que un día sucedió algo tan raro que la desorientó por completo:
—Como quiero que te tomes un descanso —anunció Larry—, voy a fregar yo los platos, así que hazme el favor de dejar esa sartén y sal de la cocina.
Después de una larguísima pausa Jo Ann contestó:
—Gracias, Larry. ¡Te lo agradezco muchísimo!
Ahora el paso de Jo Ann era un poco más ligero, su confianza en sí misma iba en aumento e incluso, alguna vez, canturreaba por lo bajo. Además, parecía que ya no tenía tantos ataques de melancolía. «Me gusta bastante la nueva forma de comportarse de Larry», pensaba para sus adentros.
Aquí se acabaría el cuento, de no ser porque un día sucedió otro acontecimiento de lo más extraordinario. Esta vez, quien habló fue Jo Ann:
—Larry —dijo—, quiero agradecerte que durante todos estos años hayas ido a trabajar para que a nosotros no nos falte nada. Y creo que nunca te he expresado todo mi agradecimiento.
Larry jamás ha revelado las razones de su espectacular cambio de comportamiento, por más que Jo Ann se ha esforzado en obtener de él una respuesta, de modo que éste seguirá siendo, probablemente, uno de los misterios de la vida. Pero es un misterio con el que me encanta convivir.
Porque, ya veis… yo soy Jo Ann.
Jo Ann Larsen

Por el Sueño de Dios- Reflexiones con Video


Hay alguien aquí, 
que esta siendo tocado por el sanador.
Hay alguien allí,
 que se esta levantando de su depresión
.
Hay una mujer
 que ha soñado a sus hijos en casa otra vez
 y esta vez te será porque ese también
 es el sueño de Dios.
Un niño ya ve,
 y el que no caminaba ya empieza a correr, 
el cáncer se va,
 y el que antes no hablaba ya empieza a gritar
, aun lado que voy
 arrancarle a este mundo lo que me robo
 este es el día de restitución
 por el sueño de Dios.
Por el sueño de Dios, 
el oprimido es libre,
 y el que no tiene ahora tiene mucho 
y el que es débil se hace fuerte,
 por el sueño de Dios
 los cielos son abiertos,
 y al que le cree todo le es posible 
y en su nombre ya esta hecho, 
por el sueño de Dios.
Levántate hoy
  deja a un lado las dudas que Cristo esta aquí
, atrévete a ir 
a tocar el borde del manto del Rey
 que en El hay poder 
y poder de Él saldrá cuando sienta tu mano cargada
 de fe en que Él lo va a hacer, 
si le puedes creer.
Por sus heridas yo sano fui,
 por su vida que hoy estas allí,
 el fue el primero que contigo soñó,
 para hacerte libre de esa maldición
.
El hace ríos en la sequedad,
 mueve montañas en la adversidad,
 si alguien le cree nunca tropezara
si alguien le busca el le responderá.

Powerpoint – El Feliz Pescador


Un banquero de inversión americano, estaba en el muelle
de un pueblito caribeño, cuando llegó un bote con un
solo pescador.
Dentro del bote había varios atunes amarillos
de buen tamaño.
El americano elogió al pescador por la calidad
del pescado y le preguntó:
¿cuánto tiempo le había tomado pescarlos? El pescador respondió que sólo un de poco tiempo
El americano luego le preguntó ¿porqué no permanecía
más tiempo y sacaba más pescado? El pescador dijo que él tenía lo suficiente para
satisfacer las necesidades inmediatas de su familia.
El americano luego preguntó ¿pero qué hace
usted con el resto de su tiempo?
El pescador dijo: “después de pescar, descanso un poco,
juego con mis hijos, hago siesta con mi señora María,
Voy al pueblo por  las noches  donde tomo vino y toco guitarra con mis amigos.
Tengo una vida “placentera y ocupada”.!!!
El americano replicó, “Soy un MBA de Harvard y
podría ayudarte. Deberías gastar más tiempo en la
pesca y con los ingresos comprar un bote más grande,
después con las ganancias podrías comprar varios botes,
y eventualmente tendrías una flota de botes pesqueros.
En vez de vender el pescado a un intermediario,
lo podrías hacer directamente a un procesador,
y eventualmente abrir tu propia procesadora. Podrías así mismo controlar la producción,
el procesamiento y la distribución. Deberías salir de este pequeño pueblo e irte a
La Capital, donde manejarías tu empresa en expansión”. El pescador preguntó, ¿Pero, cuánto tiempo tarda todo eso? A lo cual respondió el americano, “entre 15 y 20 años”.
“¿Y luego qué?” El americano se rió y dijo que esa era la mejor parte. ”Cuando llegue la hora deberías anunciar un IPO
(Oferta inicial de acciones) y vender las acciones de
tu empresa al público. Te volverás rico, tendrás millones. ”Millones … y ¿luego qué?”
Dijo el americano:
“Luego te puedes retirar. Te mueves a un pueblito en
la costa donde puedes dormir hasta tarde, pescar un
poco, jugar con tus hijos, hacer siesta con tu mujer,
caer todas las noches al pueblo donde tomas vino y
tocas guitarra con tus amigos”. El pescador respondió: “¿Acaso eso no es lo que tengo ya?”
Cuántas vidas desperdiciadas buscando lograr una felicidad que ya se tiene pero que muchas veces no vemos.
La verdadera felicidad consiste en amar lo que tenemos, y no sentirnos mal por aquello que no tenemos. ”Si lloras por haber perdido el Sol, las lágrimas no te
dejarán ver las estrellas” ¡LA FELICIDAD ES UN TRAYECTO, NO UN DESTINO!


Descarga esta diapositiva aquí:    Powerpoint – El Feliz Pescador

Crecimiento Personal » Dejando huella en los corazones


                                                                            En un foro de internet de padres de familia, conocí a un grupo de amigos de distintos países. Tuve el gusto de guiar a los pies de Cristo a dos personas, un varón y una mujer. Ella comenzó a congregarse en Costa Rica, su país, y al varón continué compartiéndole versículos y verdades bíblicas por medio de Internet pues viajaba por negocios a países de oriente.
Durante este viaje, este varón y su amigo que le acompañaba (a quien también pude contactar por mensajes de Internet), enfrentaron distintas situaciones de salud y aun de riesgo para sus vidas, por lo cual añadí sus nombres a la lista de personas por las que orábamos en un Ministerio Cibernético de Oración e Intercesión en el que colaboro.
Un buen día, una amiga me escribió para decirme que consideraba que era tiempo de que yo le enviara la oración para recibir a Cristo a este segundo varón, y lo hice, teniendo la confianza en mi corazón de que esa palabra había caído en buena tierra… y así fue.
Inesperadamente, unas semanas después, nos enteramos de que los dos amigos habían fallecido al desempeñar su trabajo.  Los del Ministerio Cibernético de Oración y yo quedamos impresionados de la manera como el Señor hace llegar su palabra para llevar salvación. Los testimonios llegaban a mi bandeja de correo acerca de avivamiento entre los intercesores por causa de lo ocurrido con estos varones, su salvación oportuna y el hecho de obedecer lo que el Señor te pide
Sin embargo, una sombra oprimía mi corazón: por haber sido a través de Internet, ni sus familias sabían que yo existía ni muchos de mis conocidos sabían de la existencia de ellos.  No les conocí físicamente nunca y tampoco conocí su voz.  Entonces, el no poder asegurar por la vista, el oído o el tacto la amistad con estas personas… ¿restaba realidad a lo sucedido?
Así, platicando con mi Pastor, él me dijo: ¿crees que no dejaste huella en la vida de ellos? ¡Están en el cielo por causa de lo que hiciste! No importa si los viste o no, ellos abrieron sus corazones a Dios y eso es lo importante!!
Pronto pude comprender que si no son reales las necesidades y las personas detrás de la pantalla (así como los sentimientos que nos van uniendo a ellas), por demás está ese Ministerio Cibernético de Oración y todos los sitios como este blog, etc… ¡sería en vano la labor que hacemos si al otro de la pantalla no hubieran personas con necesidades reales! Bendiciones para todos. 
Ahora le agradezco al Señor que en medio de todos sus hijos me eligió para llevar las buenas nuevas a esos dos valiosísimos varones a quienes conoceré y escucharé en el cielo.
No nos cansemos pues de hacer el bien…  nuestro trabajo para el Señor tiene recompensa y muchas veces tenemos simplemente que creerlo, sin ver, oir o palpar el fruto con nuestros sentidos, porque verdaderamente el Espíritu nos da testimonio de que somos hijos de Dios… está escrito: ¡¡¡El justo por la fe vivirá!!!
Pastora Rosa Amelia Díaz
CENTRO CRISTIANO VIDA ABUNDANTE