miércoles, 21 de marzo de 2012

Contigo quiero caminar


Contigo quiero caminar
Y de tu mano siempre andar
No separarme ni un instante de tu lado
En cada paso que yo doy
Quiero seguir tu dirección
Que tu palabra sea mi mapa cuando viajo
quiero vivirte muy de cerca
y respirar de tu pureza
Asegurar mi corazón
Y conocer que tu hijo soy
Y deleitarme en tu presencia
Y no sentir jamás tu ausencia
Estar confiado en tu amor
Y no vivir más en temor
Dejando lo que me impedía
Estar contigo en cada día
Contigo quiero caminar
Y junto a ti siempre habitar
Anhelo estar en el calor de tu regreso
Que tus palabras y tu voz
Sean mi compás mi dirección
Y ser oveja que el andar siga tus pasos
Haaaa quiero vivirte muy de cerca
y respirar de tu pureza
Asegurar mi corazón
Y conocer que tu hijo soy
Y deleitarme en tu presencia
Y no sentir jamás tu ausencia
Estar confiado en tu amor
Y no vivir más en temor
Dejando lo que me impedía
Estar contigo en cada día

Es por tu gracia


Cuando nadie me ve, en la intimidad
Donde no puedo hablar más que la verdad
Donde no hay apariencias
Donde al descubierto queda mi corazón
Allí soy sincero, allí mi apariencia de piedad se va
Allí es tu gracia lo que cuenta
Tú perdón lo que sustenta para estar de pie.
Y no podría dar la cara si no fuera porque soy revestido de la gracia y la justicia del Señor.
Si me vieran tal cual soy,
se enterarían que es Jesús.
Lo que han visto reflejado en mí,
tan sólo fue su luz.
Es por tu gracia y tu perdón,
que podemos ser llamados instrumentos de tu amor.
Es por tu gracia y tu perdón,
mi justicia queda lejos de tu perfección.
Y no podría dar la cara si no fuera porque soy revestido de la gracia y la justicia del Señor.
Si me vieran tal cual soy,
se enterarían que es Jesús.
Lo que han visto reflejado en mí
tan sólo fue su luz.
Es por tu gracia y tu perdón,
que podemos ser llamados instrumentos de tu amor.
Es por tu gracia y tu perdón,
mi justicia queda lejos de tu perfección.

No quiero ser como antes


No quiero volver a ser como antes fui, esa puerta esta cerrada por completa. Quiero seguir en tu camino Dios. Guíame, ayúdame para poder continuar hasta la meta. Sé que  tú aumentas mis fuerzas y me cuidas.

Nunca más seré quien antes fui
ya la puerta cerré, no volveré
más yo seguiré hasta ganar
y nunca más seré quien antes fui.
Fuego cae, arde en mi,
fluye como río hasta curarme
quita las tinieblas
y quema todo mal
para glorificar tu nombre oh Señor.
Nunca más seré quien antes fui
ya la puerta cerré, no volveré
más yo seguiré hasta ganar
y nunca más seré quien antes fui.
María del Sol – Nunca Más seré

Hoy… buscaré mi restauración


Venid a mi los que están cansados y abatidos y los haré descansar. Mateo 11
La mayoría de las veces, no necesitamos que alguien nos diga lo malos que somos. A pesar de que tratamos de no pecar, continuamos haciéndolo, y esa conciencia de nuestras fallas nos hace bajar la mirada día tras día.
El arrepentimiento no es la forma que Dios tiene de restregarnos nuestras faltas en la cara con el fin de que reconozcamos su existencia; es la forma de pedirle a Dios que restaure lo que está mal en nuestras vidas en vez de tratar de arreglar las cosas por nosotros mismos. El arrepentimiento es para personas reales con carencias reales que anhelan una completa restauración.
El llamado al arrepentimiento no es una advertencia para que rápidamente nos restauremos a nosotros mismos antes de que el Señor venga, sino una oportunidad de reconocer dónde estamos mal y perdidos. Es donde desesperadamente necesitamos Su intervención y rescate. El arrepentimiento es nuestra oportunidad de enviar una señal de auxilio cuando nuestro barco está llenándose de agua y hundiéndose. No es redoblar los esfuerzos frenéticamente para sacar con más rapidez el agua que llena cada vez más el barco.
Cuando leemos en la Biblia sobre las aglomeraciones de las personas que con entusiasmo viajaron al desierto para arrepentirse y ser bautizados, tenemos que preguntarnos a nosotros mismos por qué. ¿Por qué tantas personas pasarían por la molestia y la inconveniencia de viajar toda esa distancia si les iban a gritar e iban a ser avergonzados?
No tiene sentido, las personas evitan la censura –no la buscan. Si el llamado de Juan al arrepentimiento era un grito airado y amenazador, no es probable que alguien se interesara en participar. Esta escena bíblica que describe a un “enjambre” de gente compitiendo para tener la oportunidad de arrepentirse es completamente inconsistente con nuestra imagen cultural de un adivino que predice fatalidades en una plataforma acondicionada –y con los sentimientos que tenemos respecto al arrepentimiento como resultado de esa imagen.
¿Qué diferencia hay entre lo que ellos experimentaron y lo que nosotros asociamos con arrepentimiento? ¿Por qué estaban tan ávidos de arrepentirse mientras que nosotros somos tan renuentes para hacerlo? Quizá algunos sólo tenían curiosidad (respecto a los detalles de las confesiones públicas de sus amigos), pero la curiosidad por sí misma, o simplemente “seguir a los demás” no es suficiente para explicar por qué las personas se desviaron de sus caminos para ir a arrepentirse.
Hoy vengo a Dios, con esperanza y no bajo condenación.
Señor, te doy gracias por tu grande amor ya que me recibes en tus brazos para restaurarme y darme descanso. Amén.

Si tan solamente


“El optimismo es la fe que conduce al logro; nada puede realizarse sin esperanza.” Helen Keller
Como persona, independientemente de la posición que ocupa o el rol que desempeña, usted sabe que para alcanzar el éxito  hacen falta muchas cosas.
Muchos no lo alcanzan por que se dicen:
“Si tan solamente tuviera el dinero”.
“Si tan solamente tuviera los contactos”.
“Si tan solamente me apoyaran”.
“Si tan solamente supiera que no fracasaré”.
“Si tan solamente…”.
Lo cierto es que cada una de estas declaraciones y otras  se han convertidos en excusas para no tomar responsabilidad por los resultados que obtengamos en la vida!
Hay un ejemplo en la Biblia de una mujer que hizo tal declaración “Si tan solamente tocare el manto de Jesús seré sana”, y ustedes conocen la historia de que fue sana. Para aquellos que no la conocen la pueden encontrar en el Evangelio de Marcos 5:25-34. Ella tuvo la fe, la perseverancia, la responsabilidad, la creatividad, el compromiso, el deseo, la actitud de una persona dispuesta a enfrentar los obstáculos y sobreponerse a ellos para lograr buenos resultados. Ella se atrevió, venció cada uno de sus temores, no tenía dinero, no tenía contactos,  solamente estaba comprometida con su sueño. Ella alcanzó el éxito.
Ahora si tan solamente usted cree que tendrá éxito le aseguro que lo tendrá.
En primer lugar, es necesario tener una visión muy clara de lo que quieres lograr. Esta mujer quería su sanidad. ¿Qué quiere lograr usted?
Nunca va a llegar a la meta, si no tiene claridad en lo que quiere lograr. Tómese el tiempo para definir realmente lo que quiere. La visión es un punto de partida, no el de llegada.
Lo segundo que debe hacer es tener un plan, diseñe los pasos que le llevarán hacia su meta. Sea flexible, no sea rígido en su planificación más debe mantener una disciplina. Imaginen que esta mujer era considerada inmunda, estaba completamente apartada de la sociedad, tuvo que ingeniárselas para llegar a Jesús.
Una vez que tenga su plan, recuerde que todos los días tiene una oportunidad de avanzar. Descarte cada una de las excusas.  Cada día debe evaluarse y preguntarse ¿Cuánto me acerque a mi meta? Así tendrá la oportunidad de hacer ajustes.
Probablemente lleguen días nublados y piense que no lo va a lograr, probablemente se llenará de desánimo pero no se rinda. Me imagino a la mujer en medio de la multitud que sigue a Jesús luchando con sus temores pero sin vacilar, cuantas cosas pudieron haberle dicho, más ella estaba enfocada en su visión de ser sana. A pesar de que sienta que no está teniendo éxito, sea persistente y siempre marche hacia adelante. Siempre he dicho que Dios nos diseñó para ir hacia adelante y recuerda que una persona de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos.
Si usted se compromete con su plan, de seguro va a ser recompensado. Hay premio para la responsabilidad, para la constancia, para los que se esfuerzan. Vuelvo a la historia de la mujer y encuentro que ella estaba comprometida con su plan de tocar el manto de Jesús para ser sana y lo logró. Jesús pregunta ¿Quién tocó mi manto? Y al cabo de unos minutos ella tomó responsabilidad, y Jesús le dice: «Hija, tu fe te ha sanado. Ve en paz. Se acabó tu sufrimiento».
Si tan solamente cree y se llena de optimismo, con una visión clara junto a un gran plan y se pone en acción por sus sueños se va a encontrar con grandes premios. Debe creer que vale la pena.
En amor y liderazgo,

Reparar lo irreparable


Alguien comentó una vez que el propósito de la cruz era reparar lo irreparable.
Sabes que por medio de la sangre de Cristo tus pecados son perdonados, tus cicatrices borradas y que, una vez eliminadas, tus pecados son olvidados.
El Señor ya no los recuerda.
1 Juan 1:9
Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
Salmo 86:5
“Porque tú, Señor, eres bueno y perdonador, y grande en misericordia para con todos los que te invocan”.
Salmo 51:1
“Ten piedad de mí, Oh Dios, conforme a tu misericordia; conforme a la multitud de tus piedades borra mis rebeliones”.
Salmo 32:5
“Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: Confesaré mis transgresiones a Jehová; y tú perdonaste la maldad de mi pecado”.
Salmo 51:7-12
“Purifícame con hisopo, y seré limpio; lávame, y seré más blanco que la nieve. Hazme oír gozo y alegría, y se recrearán los huesos que has abatido. Esconde tu rostro de mis pecados, y borra todas mis maldades. Crea en mí, Oh Dios, un corazón limpio, y renueva un espíritu recto dentro de mí. No me eches de delante de ti, y no quites de mí tu santo Espíritu. Vuélveme el gozo de tu salvación, y espíritu noble me sustente”.

Tu misericordia ¡oh Dios!


Que soy yo, para que me visites
y te acuerdes de mi, Señor Jesús
que te movió a perdonarme
Tu misericordia oh Dios,
me abrazó y el pasado olvidó.
Tu misericordia, es mejor que la vida
Tu misericordia, puso en mi una canción
Tu misericordia, vivifica al caído
Tu misericordia oh Dios
me alcanzó y mi vida coronó.
Que soy yo, para que me visites
y te acuerdes de mi, Señor Jesus
que te movió a perdonarme
Tu misericordia oh Dios,
me abrazó y el pasado olvidó.
Tu misericordia, es mejor que la vida
Tu misericordia, puso en mi una canción
Tu misericordia, vivifica al caído
Tu misericordia oh Dios
me alcanzó y mi vida coronó.
Tu misericordia, es mejor que la vida
Tu misericordia, puso en mi una canción
Tu misericordia, vivifica al caído
Tu misericordia oh Dies
me alcanzó y mi vida coronó.
//Tu misericordia oh Dios
me alcanzó y mi vida coronó//

Abrazos que impactan


Estaba participando en un evento ministerial de compasión, y una mañana entré al salón de reuniones y pasé por el lado de una chica, ella me sonrió y yo me regresé pues sentí darle  un abrazo.  No me imaginé el impacto que esto hizo en la vida de esta chica.  El último día de la actividad se me acercó y me dijo:  Gracias por ese abrazo que me dio, pues me cambió mi día, y luego la volví a abrazar y le di unas palabras de ánimo y llorando me lo agradecía.
Las mujeres tenemos la facilidad de darnos abrazos y los estudiosos han encontrado que hay una conexión con nuestros órganos reproductores, donde guardamos vida.  Los abrazos sanan, ayudan en las crisis.
Has pensado en la importancia que tiene un abrazo?  Dios nos ha dado la capacidad de amar y tocar a otros con Su amor.  Y creo que nuestras manos tienen poder para bendecir.
La próxima vez que vayas por algún lado no pierdas la oportunidad de hacer algo que bendiga a alguien, no te imaginas cómo puedes ayudar a una persona en momentos críticos con solo un abrazo que se traducirá en vida.
La Biblia dice:  Ama a tu prójimo como a ti mismo.  Hacer esto que Dios nos pide, trae grandes dividendos y lleva a las personas a acercarse a Dios.
Bendiciones.

"El ingenio de una hormiga"



Hace un tiempo me puse a observar detenidamente la vida de las hormigas, y confieso que quedé asombrado al verlas trabajar con tanto orden y empeño.

Pero una hormiga en particular atrajo mi atención. Negra y de tamaño mediano, la hormiga llevaba como carga una ramita que era seis veces más larga que ella misma.

Después de avanzar casi un metro con semejante carga, llegó a una especie de grieta, estrecha pero profunda, formada entre dos grandes piedras.

Probó cruzar de una manera y de otra, pero todo su esfuerzo fue en vano. Hasta que por fin la hormiguita hizo lo insólito.

Con toda habilidad apoyó los extremos de la ramita en un borde y otro de la grieta, y así se construyó su propio puente, sobre el cual pudo atravesar el abismo.

Al llegar al otro lado, tomó nuevamente su carga y continuó su esforzado viaje sin inconvenientes.

La hormiga supo convertir su carga en un puente, y así pudo continuar su viaje. De no haber tenido esa carga, que bien pesada era para ella, no habría podido avanzar en su camino…

¡Cuántas veces nos quejamos por los problemas, las cargas y las pruebas que debemos soportar! Pero sin darnos cuenta, esas mismas cargas -bien tomadas- pueden convertirse en puentes y peldaños que nos ayudan a triunfar.

Una deficiencia cardíaca hizo de un médico un famoso cardiólogo; el impedimento físico convirtió al joven en un gran escritor; la timidez del estudiante lo llevó a ser un destacado investigador.

¡Cuántos otros ejemplos podríamos mencionar! Todos para mostrar la misma verdad; que con frecuencia debemos padecer males para disfrutar luego de los bienes mayores; que debemos llevar con valor nuestras cargas para luego convertirlas en puentes de éxito y prosperidad.

¿Estás soportando en este momento algún problema o adversidad? Recuerda que nada conseguirás quejándote o angustiándote.
Confía en Dios, Él no permitirá que la prueba te aniquile, más bien te dará fuerzas para seguir con valor y lograr mayores alturas.
Dios te bendiga.